lunes, 5 de diciembre de 2011

En los ojos de la madrugada

En los ojos de la madrugada
He contado contigo cien hadas
Algunas de distinto color
Pero todas me han dado la vida
Un aliento, un suspiro suicida
Para por la mañana jugar con el sol

En los ojos de la madrugada
He sentido como se escapaba
Otra vez mi infeliz ilusión
Y a la vuelta de mil noches perdidas
Regresar a la única vida
En la que no necesitaba tu corazón

En los ojos de la madrugada
He soñado que me despertaba
Y en la cama te tenía junto a mí
Pero luego la envenenada luz del día
Como relámpagos que hielan la vida
Me devolvía a un infierno sin fin

En los ojos de la madrugada
He mirado y no he visto nada
Ni siquiera un pequeño matiz
Donde después de tantas locuras
Pueda presumir al menos de alguna
Que me haga si quiera sentir

Y es que han sido tantas madrugadas
Que al recordarlas ahora de mañana
Saben todas a nada sin ti
Porque siempre el mundo en la frontera
Se hace distinto cuando quien me espera
Son tus labios muriéndose por mí.