Me di cuenta que todo sin ti ahora era la nada
Comenzó a llover ternura en los rincones
Pero yo sin darme cuenta llevaba mis tacones
Así de salto en salto sin calarme ni una gota
Comencé a recordar casi todas mis derrotas
Pensé en el paraíso de tus ojos cuando duermes
Mientras yo me encendía mis cigarros con la frente
Susurrándote al oído mis cientos de reproches
Y pensando que los sueños ahora eran barrotes
Yo no me daba cuenta de que tras esa mirada
Estaban los puentes que me alejaban de tu alma
Ahora con el tiempo que dan tus ojos negros
Descubro que no tengo remedio contra el miedo
Mientras sigo soñando que alguna vez me quieras
Revoloteo entre caricias que no valen la pena
Así que si me llamas y quedamos algún día
Recuerda que de noche te quiero todavía
Las mañanas se las dejo al sol con sus envidias
Mientras yo sigo jugando al juego de la vida
Espero que algún día, si lees éste poema
Entiendas que te quise y que valió la pena
Andar por las esquinas saltándonos los charcos
Mientras yo no sabía que te he querido tanto.